SERIE: REFLEXIONES SOBRE EL DADOR

Quizá creemos que dar no es un tema importante para el momento que estamos atravesando. Probablemente pensamos que es un asunto irrelevante para las cuestiones del diario vivir o incluso sientes que deberíamos estar hablando de otros temas debido a lo complicado del mundo y de nuestro país en estos días.

Pero si el dar nos parece irrelevante para este momento de la vida, entonces quizá, tenemos un asunto que arreglar con El Dios que resolvió todo DANDO. Quizá el problema  está en la imagen que tenemos de Dios, porque el Dios de la Biblia no resolvió el caos del mundo con discursos, leyes o presiones. Lo resolvió dando.

“Dios dio” es una expresión que lo cambia todo.

Revela Su amor, Su iniciativa y Su forma de actuar. Si queremos saber cómo piensa Dios, veámoslo dar a lo largo de Su Palabra. Él no retiene, Él entrega. Él no negocia, Él se ofrece. Él no improvisa, Él se anticipa dando.

Aquí está la base de todo:

Juan 3:16 (NTV) // “Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.”

La frase es tan conocida que a veces pasa de largo. Pero ahí está la esencia del corazón divino: Dios respondió al pecado dando. Dios enfrentó la muerte dando. Dios inició la salvación dando .Dios restauró la historia dando.

Y esa entrega marca el ritmo de todo lo que Él sigue haciendo: Nos dio vida, propósito, un Salvador, Su Espíritu, protección, dirección, gracia, favor, oportunidades, iglesia y familia.

Nada de lo esencial en nuestra vida nació solo del esfuerzo; todo nace de Su generosidad. Por eso dar no es un tema financiero. Dar es nuestra identidad. Aprendemos a dar porque venimos de un Dador.

En un mundo desgastado por la desconfianza, la violencia y el egoísmo, el acto de dar se convierte en resistencia espiritual. Dar tiempo, perdón, palabras de vida, atención, recursos, servicio…eso cambia ambientes. Eso abre caminos. Eso revela quién gobierna nuestro corazón.

La fe se vuelve creíble cuando el carácter del Dador empieza a verse en los que le pertenecen. Y aquí queda la pregunta que sostiene esta primera reflexión y prepara el camino para toda la serie: Si nuestro Dios resolvió los mayores problemas de la historia dando, ¿por qué nosotros a veces escogemos vivir reteniendo?

Proverbios 11:24-25 (PDT) // “Hay quienes dan con generosidad y reciben más de lo que dan; pero hay quienes (retienen) son tacaños y terminan en la pobreza. El generoso prosperará; el que ayuda será ayudado.”

En la siguiente reflexión veremos cómo la Biblia describe a Dios como el Dador en muchas áreas distintas, y cómo cada una de ellas nos enseña una forma práctica de ser personas que dan vida en un mundo que parece que solo la absorbe.

Nos leemos mañana, gracias por tu like y por compartir con alguien más esta reflexión.